El otro día escuché una cosa, que si bien puede ser parcialmente cierta, es aberrantemente falsa.
Te pongo en contexto.
Mujer con sobrepeso.
Con mucho sobrepeso.
Sale en un vídeo diciendo que comer sano es para ricos.
Primero, te voy a contar por qué esto es parcialmente cierto.
Es cierto porque ahora TODO cuesta más que antes.
La gente ha perdido mucho poder adquisitivo, y seguirá perdiéndolo.
Es lo que pasa cuando tienes una moneda respaldada por los cojones morenos de quien la imprime.
Pero esto no es una lección de economía, es una lección de gestión.
Aunque sea cierto que los alimentos cuestan más que antes, TODOS los alimentos cuestan más que antes.
Y los mejores alimentos siguen siendo comparativamente mucho más baratos que otras opciones menos interesantes.
¿Cuánto cuesta 1 litro de agua? ¿Y uno de Coca Cola?
¿Cuánto cuesta un paquete de galletas? ¿Y un paquete de lentejas?
Lo que la gente no entiende, es que tu alimentación puede ser:
Barata.
Rápida.
Saludable.
Pero esto tiene truco.
El truco es, que de esos 3 atributos, solo puedes elegir 2.
Los 2 que tú quieras, pero solo 2.
Y lo que suele ocurrir, es que la gente escoge los 2 primeros.
Piénsalo, si quieres que tu alimentación sea barata y rápida, acabarás pidiendo una hamburguesa a través de la ventanilla de tu coche.
Si quieres que sea rápida y saludable, probablemente tengas que contratar a alguien para que te cocine, o utilizar alguna de estas empresas de menús saludables que existen por ahí.
Pero no será barato.
La clave es la tercera opción. Si quieres que tu alimentación sea barata y saludable, tienes que renunciar a que sea rápida.
Esto significa que tendrás que ir a comprar, tendrás que comparar precios, tendrás que usar ofertas, cupones y quizás comprar diferentes cosas en diferentes sitios aprovechando los mejores precios de cada uno.
Luego tendrás que preparar los alimentos y cocinarlos.
Es mucho lío, por eso la gente prefiere que su alimentación sea barata, aunque tengan que renunciar a que sea saludable.
Pero al final del día, que tu alimentación sea barata y saludable solo depende de la gestión de tu tiempo.
Tiempo que ya estás gastando en otra cosa.
Lo que significa que si no quieres dedicarle tiempo a tu alimentación, es porque tienes otras prioridades.
Está bien, nada en contra.
Pero no puedes decir que comer sano es para ricos, cuando prefieres gastar los recursos que tienes en otras cosas.
Además, sea cual sea el presupuesto que tengas para tu alimentación, puedes mejorarlo drásticamente usando un shopping planner.
Un shopping planner es una lista de la compra asociada a tu plan de alimentación.
Lo que significa que para tener un shopping planner necesitas tener un plan de alimentación.
Y si quieres aprender a diseñarte uno, yo te enseño a hacerlo dentro de mi Programa de Optimización Corporal.
Pd: Comerás mejor y seguramente más barato de lo que comes ahora.