En este episodio hablo sobre los peligros del fanatismo, el daño a sí mismos que se hacen los fanáticos de cualquier cosa y también hablo de marketing, y el peor error que he cometido, que sigo cometiendo y que seguiré cometiendo.
No es un episodio estrechamente relacionado con el fitness, pero aún así, creo que es importante tener en cuenta los temas que trato durante el capítulo, porque el fitness está lleno de fanáticos y de marketeros e influencers.
Espero que os interese este episodio menos ortodoxo de lo habitual. La semana que viene volveré con otro episodio, esta vez, más ligado al fitness. Hasta entonces, ¡Que paséis un gran fin de semana!